EL BARÓN RAMPANTE

Mirar esta portada me hace retroceder muchos años... Cuando aún estudiaba en el instituto, que es cuando me leí este libro. Y qué gran recuerdo tengo. Fue uno de mis libros favoritos durante mucho tiempo, de ahí que por aquella época me entrara una cierta obsesión con Italo Calvino y me leyera un montón de libros más de él. Eso sí, ninguno me gustó tanto como éste.

Italo Calvino

El Barón Rampante (1957) forma parte de una trilogía llamada : Nuestros antepasados,  junto con El vizconde demediado (1952) y El caballero inexistente (1959). Su autor, Italo Calvino, decidió dar un cambio al carácter  realista que tenían sus anteriores obras, basadas en sus experiencias durante la 2ª guerra mundial, tal como se veía en su primera novela: El sendero de los nidos de araña  y en el libro de cuentos: Por último, el cuervo. Y se pasa en los años 50 a la literatura fantástica con esta trilogía y un par de novelas más. En los años 60 volvería a dar un cambio que combinaba ficción y realidad. Las ciudades invisibles , Si una noche de invierno un viajero y El castillo de los destinos cruzados son tres de las novelas que me leí de este periodo. No me disgustaron, pero me sigo quedando con la trilogía fantástica. También he de destacar que me encantó la antología de Cuentos fantásticos del XIX, que reúne Italo Calvino (en dos volúmenes), de varios autores tan distintos como Edgar Allan Poe, Dickens, Stevenson, etc... Muy interesante.

Me encantan las portadas de esta colección de Siruela.

El Barón rampante está ambientada en la Italia del S.XVIII en la región de Ombrosa, donde vive el protagonista Cosimo Piovasco (barón de Rondó) con sus padres (unas personas severas y autoritarias, cuya única obsesión es ascender en la escala social) y con su hermana Battista y su hermano Biagio. Este último es el narrador de la historia, en la que nos cuenta cómo Cosimo, con sólo doce años, decide rebelarse en busca de la libertad. Tomando la decisión, en ese mismo momento, de vivir encima de los árboles sin tocar el suelo hasta el fin de sus días. Promesa que cumplirá hasta el final. Su vida por los árboles no es aislada ni monótona. Se enamora y le pasan infinidad de cosas gracias a la multitud de encuentros que tiene con gente de otros países (por lo que aprenderá un montón de idiomas) y con diferentes personalidades de la sociedad de la época. Desde gente de la nobleza hasta criminales y hasta el mismísimo Napoleón!! Una historia única e inolvidable.

Y para acabar un poco de música italiana con Mina, en un vídeo de una película que acaba con un bofetón al pobre Adriano Celentano!